¿Cómo un Ministro del Señor se convierte en falso profeta?

Hay muchos ministerios en esta situación y que libremente predican desde el púlpito. Sus escándalos, pecados y extravagancias han sido apagados porque aparentemente no han perdido vigencia; siguen convincentes, saltan en la tarima, oran a grito abierto, animan a sus seguidores con promesas de la Palabra, más atrevidos, a tal grado que para el Creyente ingenuo le parece que allí en ese Culto está la presencia del Espíritu de Dios, siendo que solamente está ante la presencia de efectos especiales.

Pero ante Dios y Su Hijo ya han sido clasificados como falsos profetas. Tenemos el ejemplo del padre de los falsos profetas, Luzbel, a este se le dio toda clase de dones y virtudes para poder desempeñar su trabajo dentro del Huerto de Dios, cuando le fue encontrada maldad, Luzbel fue destituido de su cargo y echado fuera de la presencia de Dios.

Sin embargo, usted pensaría que sería despojado de su don y llamamiento, pero no fue así. Romanos 11:29 dice que "Porque irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios" Luzbel sigue vigente, pero no dentro del reino de Dios, sino en el reino de tinieblas siendo esa su residencia actual, pero su campo de trabajo es en la misma "cocina" de La Iglesia v con vestimenta de ángel de luz.

Luzbel se convierte en el falso profeta, aunque su apariencia parezca lo contrario, por los dones y llamamiento que le siguen; muy pocos pueden discernirlo a él y a los Ministros que se han convertido lo mismo que Luzbel en Falsos Profetas, dado que estos ministros cuando pecaron tuvieron una oportunidad de arrepentimiento, pero cuando se dieron cuenta que el don de Dios y el llamamiento no se había evaporado ni apartado de ellos, volvieron con cinismo y desvergüenza al púlpito con una nueva investidura de "ángel de luz" a la manera de Satanás.

!YO ACUSO!

Los Ministros de las Organizaciones Religiosas han emitido un YO
ACUSO. Reiteradamente estan afirmando que el Padre de nuestro Señor
Jesucristo tiene muchos hijos que !SON RATEROS! ya que el púlpito lo
están usando para lanzar acusaciones a los Creyentes que no dan sus
diezmos, recalcándoles Malaquías 3:10
Los Ministros se quejan de que muchos Creyentes redimidos con la
sangre de Cristo, NO DAN SUS DIEZMOS.
Aparentemente, estos Pastores no completan con los diezmos y ofrendas
recibidas que tienen que inventar "pactos de fe", "promesas", venta de
discos con música reggatona, tamales, venta de librosy muchas cosas
más.
Estos Pastores presuntamente se han esforzado tanto en pastorear a los
hijos de Dios, que reclaman que Dios les haga justicia, pues no es
justo que ellos sacrifiquen sus vidas protegiendo a los hijos de Dios
y que no puedan comprar un litro de leche para alimentar a su familia.

Dios va a tener que reivindicar su propio Testimonio y sancionar y
poner un castigo ejemplar a sus hijos para tener satisfechos a sus
Pastores.

Profetas

En realidad lo que percibo, no es que se esté rechazando la
"profecía", más bien lo que se rechaza es al PROFETA.

Esto es debido a la resistencia de reconocer la autoridad de Dios y de
su Hijo, pues tendrían también que aceptar la autoridad del Profeta o
los Profetas de Dios; y eso, los Ministerios no están dispuestos a
someterse a ninguna autoridad que no les convenga, pues al aceptar al
Profeta tendrían que aceptar la profecía.


Es por eso que algunos grupos o denominaciones fabrican sus propios
profetas para usarlos y que profeticen lo que convenga a esa obra en
particular, o a los líderes de esas organizaciones; es decir son
marionetas sujetos a ese tipo de sistema.

Es más, están dispuestos a aceptar a un "Apóstol" por carecer del
carácter y el perfil del Profeta, así no peligra la libertad de los
Ministerios al sujetarse a alguien que verdaderamente no tiene palabra de
Dios.

Es común ver como muchos pastores están dispuestos a seguir a "un
apóstol" porque ven algunos privilegios o intereses que pueden ser
aprovechados, pero si ese Apóstol tuviere verdaderamente Palabra de
Dios, no lo seguirían.

Son tiempos difíciles para la obra del Señor y se necesitan verdaderos
siervos que se sujeten a su Señorío y obediencia a su Palabra; son
pocos los que hay con esa disposición, los demás prefieren sujetarse
al hombre bajo la bandera denominacional.

Mientras los Ministerios y Asociaciones Religiosas se resistan a una definición de cambio, a una sujeción de lo que Dios diseñó para que la Iglesia fuera suficiente y eficiente en el campo de la Evangelización; como una verdadera alternativa al Mundo en oscuridad; con una definición de cambio hacia el interior de La Iglesia para que los hijos de Dios tengan el crecimiento y desarrollo espiritual debido bajo un discipulado sustentable; para esto es necesario la sensibilidad de los Ministros a sujetarse a Efesios 4:11, para que la Iglesia milite bajo la Autoridad de Dios bajo sus Apóstoles, Profetas, Evangelistas, Pastores y Maestros.

Solo de esta manera la Iglesia del Señor Jesucristo saldrá de la oscuridad, la corrupción, el pecado, la herejía, falsas doctrinas y falsos ministros; de la división, del desorden, del dominio de pastores individualistas y del surgimiento espurio de ministerios académicos que a río revuelto se han enriquecido, y algunos han querido gobernar La Iglesia.

Solo de esta manera la Iglesia del Señor Jesucristo será confiable al Mundo, presentando un Evangelio puro donde el Hombre encuentre una verdadera redención bajo el Señorío y sacrificio de Jesús el Hijo de Dios, y no un remedo de salvación manipulable por muchos ministros.

Una Iglesia bajo la autoridad profética de los Ministros de Dios (Efesios 4:11), con el carácter y el perfil cincelado por Dios, que mire por TODA la Iglesia que el Señor edificó con su propia sangre y no por iglesias personalistas edificadas con el sudor y el esfuerzo humano, que buen trabajo les ha costado a los ministerios profesantes.

Las Sectas seguirán ofertando palabra humana y un evangelio ilusorio, pero tendremos una Iglesia que el Mundo podrá discernir y que a la luz verdadera de Cristo, podrá zafarse de ellas y definir los ministerios que con temor oran por esa Iglesia que edificó el Señor.

La apostasía es inevitable, pero usted no tiene por que aceptarla, solo bajo una Iglesia con autoridad profética podrá rechazarla y resistirla.